sábado, 26 de noviembre de 2011

“We are dying from overthinking. We are slowly killing ourselves by thinking about everything. Think. Think. Think. You can never trust the human mind anyway. It’s a death trap.”



Por que llega un momento en el que extraña - e irracionalmente - me viene a la cabeza una palabra que oí mucho en mi época del hospital.
Asepticidad. 



Y qué bien suena en determinados momentos. 
MF, se aséptica.
Siempre. 
No falla. 


A estas alturas de la historia, uno ya no sabe si darse la vuelta para ver si su sombra sigue ahí, o se ha ido a tomar unos chupitos de Jack con la del vecino. 
Total, ya de puestos, el azar sigue tomándome el pelo. 


- This is how you remind me - Nickelback, a estas alturas, en el Itunes, no eres nada sano. 
- This time I'm mistaken
For handing you a heart worth breaking - 
Venga, vamonos. 


Y sí, cuando entra en calor, duele. Y sí, hablo en tercera persona con toda la intención del mundo. 

Hola, Quique. Nos encontramos de nuevo. Hace un rato, en el bar, tu voz no sonaba tan.. así. Tan ronca, raspante.
Pero de estas que te raspan hasta la médula. Aun así, voy a resistir la tentación de cambiar de canción, por que a estas horas, lo único sano que podría hacer sería bajar a la cocina a por un vaso de leche y unas galletas, y me da que no. 
En fín, voy a aprovechar un inciso - nada sano, hablando de tal y eso - de La fuga, para despedirme. 

32días. 


"Absurdo, como un domingo por la tarde,
como las balas por el aire, 
como el puto despertador.
Inútil, como los besos que no diste,
como un cuerpo que se viste,
cuando me desnudo yo.

Y ahora que, voy más solo que la luna, negociando gasolina para este amanecer, ya ves, voy buscando en la basura, unos labios que me digan, esta noche quédate." 

No hay comentarios:

Publicar un comentario